Al principio te da igual elegir un arma láser o tagger que otra, pero cuando ya has jugado más de una vez empiezas a notar las diferencias.
Uno de las características que todos tenemos en cuenta es el peso. Cargar con un equipo demasiado pesado no es lo ideal y puede fastidiarte el día. Muchas veces nos dejamos llevar por la estética y esto nos puede llevar a una eliminación rápida de la partida. Si no puedo con el equipo me cuesta más desplazarme y apuntar.
Si eres de los que les gusta moverse rápidamente por todo el escenario cambiando de posición es más recomendable una unidad con el cañón corto que una de cañón largo. Pero si lo tuyo es el estilo "campero" entonces te fijará más el alcance que el tamaño del cañón.
Algunos campos, como Madrid Láser Combat, ofrecen distintas configuraciones para sus equipos. Esto también supone una diferencia. En estos casos tendrás que tener en cuenta el número de vidas, calibre, velocidad de disparo o recarga y hasta el tamaño del cargador. Esto nos dificulta la elección pero también lo hace mucho más interesante.
El último factor a tener en cuenta sería el tipo de juego al que te enfrentas. Si es una competición de partidas rápidas buscarás un arma que se adecue a tu posición en el campo. Si juegas a misiones, debes buscar la que encaje mejor con el objetivo.
En resumen, cada jugador es un mundo así que busca un campo de láser combat que te de opciones.
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